La fuga

Avogadro, Marisa

Fugaba su mirada por la sala. Recorría rincones, acariciaba sedas, se bañaba en azahares y misterio. Fugaba sus latidos inciertos, su amor y su desconcierto. Estaba detenida. Quizá helada o sorprendida.

Estaba Él. Fugaba su mirada y fue el encuentro.

¿Fugaba o ansiaba anclarse? Ahora es cierto.

Demasiado prácticos

Hidalgo, Paloma

Nos acercamos a la estufa, pero no conseguimos romper el hielo, entonces decidimos entablar conversación.

Tan breve

Álvarez Martínez, Patricia

Fue tan breve el tiempo en que me quiso, que cuando terminó de oírse el eco de mi voz cantando, él ya se había ido.

Letras de amor en su rostro

Frini, Daniel

Nunca supe su nombre. Nos miramos y fue amor a primera vista. Pude leer en sus ojos el amor, la pasión, esas ganas de entregarse por completo al otro. Todo duró unos tres segundos. Tocó timbre y se bajó del colectivo. Nunca más volví a verla. Por ahí me equivoqué. Una de dos: o no soy bueno para la lectura de rostros, o ella escribió en su cara con muchos errores de ortografía.

Al-Qahira

Nasello, Patricia

La Tierra se embarazó del Sol. De su matriz oceánica surgió la vida. Ahora lleva millones de años tolerando a sus hijos. Y a la Luna, que habiendo observado el comportamiento de esos hijos, no hace más que jactarse de su antigua frigidez.

Romance fugaz

Nasello, Patricia

“Lo mejor es separarnos”, iba a decir él. Ella se adelanta:

—No te quiero más—miente. Y con un gesto pide que guarde silencio.

Amor imposible

Vega L., Juan Manuel

Sentado en el bus la miró. Morena. Más bien pequeña, hermosa. Recordó entonces su primer beso, las sonrisas, las lágrimas. Escuchó de nuevo el ruido de su colchón aquella primera vez. Abrió los ojos, ya no estaba. Se odió a sí mismo. Ojalá alguna vez le hubiera dicho “Hola”, para que todos sus recuerdos hubieran podido suceder.